ENERO 2022
Autores: Eloy Caloca Lafont y Erika Pérez, con la colaboración de Martín Zumaya.
Las culturas políticas de derecha se pueden definir como un conjunto de agendas, ideas, intenciones, acciones y emociones que orbitan en torno a dos grandes posicionamientos: el neoliberalismo y el conservadurismo. El primero sostiene que la economía capitalista, la propiedad privada, el libre mercado y la meritocracia llevan a las sociedades al bienestar; mientras tanto, el segundo se distingue por la defensa de las “buenas costumbres” y la moral judeocristiana, así como el rechazo a las iniciativas progresistas, como aquellas promovidas por el feminismo, las diversidades sexuales y el derecho a decidir sobre el propio cuerpo. Partiendo de ambas variantes de la derecha, en México existen múltiples grupos y figuras públicas que se han encargado de abanderar estos planteamientos, sobre todo después del triunfo electoral de Andrés Manuel López Obrador, quien, al ser un presidente de izquierda, ha sido objeto de continuos ataques e intentos de desprestigio, al ser calificado como dictador, autoritario o comunista. Para desplegar y fortalecer su oposición ante el proyecto de López Obrador, conocido como “La Cuarta Transformación”, los partidarios de las derechas se han utilizado ampliamente las redes sociodigitales, organizándose en diferentes comunidades; generando páginas, grupos o cuentas afines a sus posturas; o distribuyendo contenidos multimedia que refuercen sus causas. Así, construyen narrativas, caracterizadas por la desinformación, donde presentan aliados y enemigos, explican sus valores y cosignas, e incitan afectos como el odio o el temor.
Elegimos una ruta metodológica cualitativa y digital, basada en:
La recolección longitudinal de textos y contenidos (gráficos y audiovisuales) de un grupo de WhatsApp y página de Facebook de FRENAA, de marzo de 2020 a abril de 2021, considerando tres tópicos clave: a) las caravanas de automóviles organizadas por el Frente en todo el país; b) el campamento de la agrupación en el Zócalo capitalino; y c) su respuesta frente a la estrategia nacional de salud para prevenir y combatir el Covid-19. Dichos materiales fueron analizados considerando posicionamientos políticos y mecanismos de persuasión, verdad y exclusión.
El análisis del discurso y las prácticas digitales alrededor de cuatro cuentas de influencers conservadores en TikTok y un análisis a partir de la extracción de publicaciones e imágenes compartidas en torno a los hashtags que se definieron en la disputa por el aborto en Twitter (del 6 al 13 de septiembre de 2021).
Los grupos de derecha en México presentan una gran variedad de discursos, tácticas, agendas y audiencias, aunque esta diversidad no se distancia de los principios ideológicos del neoliberalismo o del conservadurismo.
El uso de plataformas socio-digitales le ha permitido a las agrupaciones de derecha diversificar sus audiencias y seguidores, así como conectar con movimientos similares y aumentar su visibilidad y alcances.
Para fortalecer sus discursos, los grupos de derecha pueden recurrir a la desinformación. Así también, sus temas y agendas operan en modo sincrónico y diacrónico: mientras algunos contenidos repiten ideas todo el tiempo, otros responden a coyunturas muy específicas.
El Frente Nacional Ciudadano o Anti-AMLO (FRENAA) puede entenderse como un populismo de derecha porque su discurso recurre a estrategias como la exageración, el alarmismo, el catastrofismo, el odio y el temor. Asimismo, caracteriza las ideologías de izquierda como un “socialismo peligroso” o el “avance mundial del comunismo”, y las asocia con el autoritarismo, el fin del Estado de Derecho y la violación de las libertades individuales.
En los mensajes y contenidos socio-digitales de FRENAA se enfatiza su antagonismo hacia Andrés Manuel López Obrador, sus seguidores o su proyecto político (La Cuarta Transformación o 4T), adjetivándolos como enemigos, incapaces, retrógradas o traidores, mediante varios insultos. En contraparte, el Frente se autorrepresenta como un grupo de libre-pensadores patriotas y liberales que defienden su derecho a la resistencia pacífica.
FRENAA exalta el nacionalismo, a través del uso de motivos tricolor y simbología patria. Así también, recurre al uso de símbolos y consignas con alusiones a la religión católica.
Aunque FRENAA se autodefine como apartidista, retoma o comparte contenidos de páginas oficiales de partidos políticos o actores de derecha en México. Por otro lado, hay opositores del gobierno de López Obrador que se desmarcan del Frente y otros que lo defienden.
Las y los influencers conservadores son un tipo de actor social emergente propio del contexto sociodigital; funcionan como una vía de difusión del discurso de derecha en el entorno digital y entre audiencias jóvenes.
A diferencia de los movimientos conservadores que en el pasado aludían a la moral católica, a los valores o la familia tradicional, los influencers conservadores han ampliado sus recursos discursivos utilizando a la ciencia como elemento de autoridad.
En TikTok se apela más al lenguaje científico y médico, con un humor irónico y burlón hacia las feministas y personas que llaman “progres”; en Twitter encontramos imágenes y mensajes que buscan convocar al miedo y la culpa, además de incluir elementos religiosos.
Las plataformas socio-digitales proveen a estos actores de distintos recursos audiovisuales que pueden fortalecer el carácter emocional de su mensaje. Por ejemplo, videos, música, imágenes, transmisiones en vivo. Además de permitirles conectar con movimientos similares en otros países e incorporar sus elementos simbólicos y discursivos.