Facultad de Filosofía y Letras
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Introducción
Pájaro cascabel.
Oniromante aquél,
que surca y escribe,
lo que sueña y vive,
en flores de papel.
METRONETO
Entre la suburbana superficie
y en el lago de corte Uroboros,
cajones naranjas llenos de lloros
recorren las venas de la planicie.
En sus puertas se juntan fieros toros,
esperan que la corrida inicie.
Retraso provocador de desquicie,
furia que invoca por medio de coros
Voces desesperadas, apuradas.
Doce rumbos, muchos mundos en ellos,
almas los abordan, atormentadas,
mandadas por los colores aquellos,
excepto por la nueva, la dorada
que cayó, dejó aquel matasellos.
Haiku I
Urbana noche,
la luz melancólica
que nos devora.
Soneto nocturno I
Familiar hechicero me vio
el núcleo lleno de desequilibrio,
que lo carcome como feroz vibrio.
Su origen, del niño que lloró
la noche que a la madre encubrió.
Producto de Amor en desequilibrio,
por el padre quien hizo su ludibrio
con aquella la cual acarició.
La disputa superada con Corte,
pero con un niño que penitente
con recuerdo doliente que soporte
la gran herida, cicatriz potente.
Aquel morro con cabizbajo porte,
aún es como un testigo durmiente.
Haiku II
Nocturno manto,
encubre pensamientos,
culpas pasadas.
Décimas periféricas
Espero solo y paciente,
vigilo mi horizonte.
Ruidosa señal del monte,
como Caronte se siente.
Subo cual vil penitente,
almas calladas y pobres.
Veo sus vidas salobres
endulzadas con las luces
de las pantallas azules.
¡Oh, los obreros deudores
pagan las vidas crueles!
Costo altísimo es el vivir,
el existir, también el morir.
La carga que hay en las pieles
que sirven a altos niveles.
El viaje por el Cocito,
cruel y necesario rito,
me lleva diario al abismo,
que resulta ser el mismo
cruel y frío infiernito.
Haiku III
Bosque urbano
con luciérnagas y
escarabajos.
Cuatro, dos, tres
Cuatro estaciones tiene el año,
y en cada una de ellas te extraño.
Cuatro veces te he besado,
cada una un sueño dorado.
Dos veces que he olvidado,
tú eres lo más apreciado.
Tres cosas que me gustan de ti:
tu personalidad, tus ojos
y tú original frenesí.
Aforismo (Haiku imperfecto)
El alma es como
una hoja en blanco donde el cosmos pinta.
Tarot
En el cruce la villana gitana
leía a los curiosos que pasaban
sobre destinos y vidas que ganan
y pierden la posesión más preciada.
Chiste
Pequeño chascarrillo
este que ahora escribo:
¡Oh qué sabroso estío
que suda al asterisco!
Soledad
Hoy día vas a morir,
o puede que mañana.
Tu esencia no engaña,
y esto puedo inferir:
es momento de partir.
La faz que se está oculta
y con el nombre: Penumbra
describen ese misterio,
el del descanso eterno
tuyo, ese el de la oriunda
de la más vil soledad:
esa que es involuntaria
. No supe tu vida diaria,
ni de cuál era tu edad.
Pero sé tu necesidad,
y por eso lloraré.
Con memoria llevaré
aquel último respiro.
Cincelado silbido,
que siempre recordaré.
Cumulodraconis
Hoy conocí a un dragón,
lo vi lejano, en el cielo.
Observaba con recelo
el bosque urbano,
ese mágico, trágico y humano.
Olímpico humano
Hijo lejano de Leto.
Gemelo artificial
de la cazadora vestal.
Deja de acusar, usar, causar mal
con tu arco, lastima al fallar.
Fallar, matar y engañar,
ocultar se te da más.
El acertijo equivocado,
condenó a otro su hado.
Deja a la joven Dafne
que engañas. Deja el signo
Géminis, que con eso marcas
tu falso dogma y culto insigno.
Ejercicio
Y te vas, buscando un cambio.
Y te vas caminando a diario.
Y te vas con tu corazón llorando.
Y, te vas, refunfuñando.
Y Tebas por Edipo fue salvado.
Y te vas así, ¡bastardo!
¿Y te vas a ir así? ¡Qué estilazo!
Y Texas hace mucho fue anexado.
¡Y te vas a ir castigado a tu cuarto!
Y teclas se tocan en el piano.
Y tejas se ponen en en techo plano.
Y te vas con otrx, ¿me estás cortando?
Y te vas a embriagar con tu cuñado.
¡Y te vas a casar con un pendejazo!
Y te vas… Te vas… Y te vas…
Te vas, hasta ser un sueño lejano
Octlioso
Loto divino, hija revivida.
Con tu leche me embriago y compongo
cantos, te dedico flores. Repongo
mi energía y ánimo con tu vida.
Vampiro mareado, bebo y prolongo
el prolapso de mi mente. Huida
la raón, mi intuición, enloquecida,
llora, grita, se suicida. Me pongo
melancólico. Revivo un pasado
lejano. Tirado, rodeado veo
conejos alborotados. Juzgado
y enterrado. Solo así me libero,
oh maguey, de mi estático estado.
Me vuelvo movimiento verdadero.
Por: Adrián Mayorga Rojas
¿Qué pasaría si le confiamos la humanidad a la tecnología?
Por: Raquel Alducín Lira
Odio la vida adulta que dice que la vida no es una película
Por: Julio Reyes
Una obra maestra para reflexionar sobre nuestras acciones y su impacto en la sociedad