Escuela Nacional de Ciencias de la Tierra
Escuela Nacional de Ciencias de la Tierra
Me gustaría celebrar la vida y no llorar mi realidad; que mi existencia sea abrazada y no condenada en manos que predican mi funeral. Quiero celebrar mi cuerpo, que grita su voluntad, sin el miedo inmarcesible de que le roben su calor. Grito mi libertad, pero nadie me escucha, nadie me ve. Me construyo a través de la historia de aquellos anonimatos que se silenciaron en el nombre de otro; me exilio con aquellos sin rostro. Soy el fuego en la utopía reveladora, en la fuerza del que lucha contra el supremacismo colonial. Soy protesta, soy consigna, soy neurodiversidad disidente, soy válide. El odio visceral no va a cambiar mis letras. Soy el dolor revolucionario que seguirá gritando por aquelles que han perdido su voz y el aliento. Soy perpetuo movimiento de la sangre derramada. Soy la trans-formación de la muerte que me deseas.
Por: Tania Maite Ortega Valtierra
Poema sobre lo que amamos de una persona
Por: Astrid Guadalupe Tufiño González
Enmarañamos la indiferencia como símbolo de una sociedad cansada y sin cuidados
Por: Ángel Gabriel Pérez Gaytán
Hablemos de extorsión y el miedo constante a la humillación