¿Se han preguntado cómo cambiamos de estrellas pop “rositas” como Belinda o Britney Spears a estrellas pop con conceptos más alternativos como Bruses o Billie Eilish? ¿Cómo cambiamos de que las canciones pop más escuchadas pasaran de tener mensajes amorosos, aspiracionales y melodías alegres a tratar temas más sombríos con sonidos alternativos?

La respuesta está en la evolución de los gustos de la audiencia, la influencia de las redes sociales, y cómo hemos erradicado tabús al momento de expresar ciertas emociones y en una artista neozelandesa que revolucionó el pop y supo usar todos los factores mencionados a su favor: Lorde.

En este ensayo explicaré cómo Lorde marcó tendencias que siguen vigentes para la producción de música pop y como fue el caso de éxito que animó a otros artistas a experimentar con sonidos minimalistas/alternativos y a interpretar sus experiencias sin filtros. La música pop se creó a finales de los años 50 ́s como una mezcla del rock y otros géneros populares del momento, de ahí su nombre, pues “pop” es una abreviación de “popular”, desde su creación este género ha ido evolucionando con los años para consolidarse en los 80´s, en esta década el pop se caracterizó por el innovador uso de sintetizadores, también aquí surgieron los primeros iconos pop: Janet Jackson, Cindy Lupper, Kate Bush y Madonna (Fernandez, 2019). 

Todas estas artistas escribían sobre el amor y usaban sonidos “chillones” que transmitían alegría, en algunas ocasiones trataban el tema el desamor, pero la tendencia siempre apuntaba a enaltecer el amor, sin embargo, la cantante norteamericana Kate Bush (artista que después Lorde usaría como una influencia en su música) fue de las primeras en experimentar con los sonidos alternativos y temas no tan alegres (ejemplo: “Running up that hill” de 1985 en donde habla sobre afrontar el duelo).

 Madonna fue otra que en algunos momentos difirió de las primeras tendencias mencionadas (ella se enfocaba más en quitar el tabú a la sexualidad de las mujeres), pero sin duda lo que más impacto generó esta última fue su concepto de “chica material” que dio origen a las tendencias pop de los 90’s y 2000’s.

En estas dos décadas dominó la imagen de la estrella pop perfecta siendo Britney Spears el estándar, aunque ella al principio no se involucró en la producción de sus canciones (algo totalmente común en la época). La tendencia que Spears impuso fueron sonidos alegres, dramáticos y sobre todo bailables, las letras en moda apuntaban más hacia lo aspiracional, presumir las pertenencias materiales, exaltar la felicidad y el amor. 

Pero a finales de los 00`s llegaron a la escena artistas emergentes que manejaban otro concepto, pero no eran tan populares, un ejemplo es Saint Vincent. En la propuesta musical y conceptual de estos artistas se preferiría aceptar las emociones que se tendían a reprimir en la época (tristeza, decepción o desmotivación), sin embargo, estos conceptos no lograban tener una gran popularidad, hasta que en 2013 Lorde cambió esto.

Ella Marija Lani Yelich-O’Connor, también conocida por su nombre artístico, Lorde, nació el 7 de noviembre de 1996 en Nueva Zelanda. Fue firmada por una disquera desde los 12 años, y al igual que Britney Spears en un principio trataron de que un productor creara su música, pero ella no estaba de acuerdo, así que empezó a escribir sus propias canciones sobre su sentir y sus experiencias como adolescente de la clase trabajadora.

Así reunió 5 canciones que en 2012 fueron lanzadas en un EP, estas composiciones hablaban de la frustración que sentía la artista por no tener la autonomía que quería y por tener que cumplir las expectativas que le ponían, estas letras eran acompañadas por sonidos muy minimalistas (en todas las canciones, es su voz modificada, sintetizadores y piano), este material tuvo un gran éxito, tanto que alcanzó el puesto número dos en las listas de popularidad en Australia y Nueva Zelanda. En 2013 es cuando Lorde logró poner en tendencia los sonidos nostálgicos con su canción “Royals” que alcanzó el puesto número 1 en las listas de popularidad de todo el mundo.

La melodía de “Royals” consiste en chasquidos, un beat de fondo y su voz modificada, es decir, la composición era demasiado simple para lo que estaba de moda en ese año. Su letra es una crítica a lo ostentosa y presumida que es la sociedad, en la pieza Lorde refleja lo angustioso que es que todo mundo te presione para llevar un estilo de vida regido por esta norma materialista, también crítica a las canciones más sonadas de ese entonces que sólo sabían musicalizar su ambición, sus pertenencias materiales y sus relaciones amorosas de fantasía:

“No nos interesa tu relación amorosa

Nunca seremos reales

Eso no está en nuestra sangre

Ese lujo no es para nosotros”

(Litle, J. Yelich- O’Connor, E. 2013, 1:56)

Estas críticas generaron una discusión al interior de la industria y dentro de la audiencia, además el público veía a la propuesta de Lorde como algo refrescante, algo con lo que se podían identificar, aumentado así su interés por conocer más de la artista. 

Meses después la artista lanzaría su primer álbum “Pure Heroine”, en donde sigue con esta corriente minimalista/alterna y sus mensajes críticos. El tema principal en este álbum es el miedo a crecer y aceptar en donde se crece, pero sin dejar de criticar este espacio. En canciones como “Tennis Court” y “Buzzcut season”, la cantautora critica la actitud indiferente y aburrida de la sociedad a la que pertenece., así Lorde logró que el público adolescente se viera proyectado en ella y su música.

 Cuatro años después lanza su segundo álbum “Melodrama”, producido por Jack Antoff, aquí ella explora cómo se siente ahora que ya creció y que ha logrado tener esa autonomía que tanto deseaba tiempo atrás, además comparte su proceso de duelo tras terminar una relación. El concepto nostálgico sigue siendo el mismo, solo que, con sonidos más vivos, pero manteniendo esa esencia minimalista. 

En esos 4 años su base de seguidores la siguió esperando, algo no muy común, y es que Lorde logró cautivarlos con su innovadora forma de producir y expresar. A partir del gran éxito que tuvo este material (debutó en el puesto número uno del Billboard 200) las disqueras descubrieron que podían vender más si lograban que el público se identificará con el artista. Esta estrategia la han explotado al máximo y esto podemos verlo en el cambio drástico que han tenido las letras y los ritmos de las canciones más escuchadas.

Además, después de producir el aclamado melodrama, Jack Antoff trabajó en otros 5 álbumes que siguen toda esta corriente pop minimalista-alternativa: Norman Fucking Rockwell! (2019), Violet Bent Backwards over the Grass (2020), Chemtrails over the Country Club (2021) de Lana del Rey,  Folklore (2020), Evermore (2020) de Taylor Swift y volvió a colaborar con Lorde para su último proyecto, Solar Power (2021), en donde la artista hace una reflexión de las vivencias expuestas en su proyectos anteriores.

Una vez que Lorde triunfó, más artistas se animaron a contar sus experiencias en crudo con los sonidos que ella propuso y logró posicionar como populares, tan solo basta con escuchar las canciones más populares de los últimos años, por ejemplo “Bad guy”  de Billie Eilish lanzada en 2019, está compuesta por chasquidos, además de  algunos beats de fondo, otro caso es  “Drivers License” estrenada en 2020 de Olivia Rodrigo, esta pieza es una balada minimalista en donde el protagonista de la melodía es una alarma de coche.

Esta última artista, Olivia Rodrigo, tuvo el álbum más reproducido de Spotify en 2021 (Naomi, 2021), en este material la artista trata temas con los que cualquier adolescente se puede identificar, desde la ruptura de una relación, hasta describir la frustración que ella siente por crecer. Este último tema, antes de Lorde, no era muy recurrente en el pop:

“Estoy tan cansada de los 17

¿Dónde está mi sueño juvenil?

Si alguien me dice una vez más

“Disfruta tu juventud”, voy a llorar”

(Nigro, D. Rodrigo, O. , 2021, 0:37)

En conclusión, el pop siempre ha experimentado con la nostalgia y los sonidos alternativos, pero pocas veces este concepto superaba a la moda del pop “alegre”, con Lorde por primera vez los proyectos pop alternativos lograron posicionarse como la moda., la razón de este éxito fue que la propuesta de la neozelandesa difería de lo aspiracional, incluso lo criticaba, y por medio de su música contaba situaciones con las cuales cualquier adolescente se podía identificar.

Su influencia se ve hasta la actualidad, pues ahora los adolescentes buscan artistas con música para identificarse, artistas con melodías que sean un acompañamiento para cualquier situación que atraviesan., en consecuencia, los productores buscan crear esa música y promocionarla con estrategia que pretende crear una relación empática artista-público. 

Fuentes:

Abarbanel, A. (2015, 29 mayo). The Shifting Image of the Teenage Female Pop Star: How We Got from Britney Spears to Lorde. httpss://www.vice.com/en/article/rdz7ay/britney-vs-lorde-a-case-study

Fernández, N. (2019, 17 enero). ¿Qué es la música pop? LOS40. httpss://los40.com/los40/2019/01/17/musica/1547725106_427935.html

jose m. (2020, 30 julio). Sin LORDE, Billie Eilish no sería Popular | El quiebre del pop [Vídeo]. YouTube. httpss://www.youtube.com/watch?v=9C9qVePwpXs

Litle, J. Yelich- O’Connor, E. (2013) Ribs [Canción]. En Pure Heroine. Universal Music New Zeland Limited. 

Naomi. (2021, 1 diciembre). Lo que Más Escuchó el Mundo en 2021 — Spotify. Spotify. httpss://newsroom.spotify.com/2021-12-01/lo-que-mas-escucho-el-mundo-en-2021/

Nigro, D. Rodrigo, O. (2021) Brutal [Canción]. En Sour. Sony Music Publishing.

O’Neill, L. (2018, 13 noviembre). Sobre juventud, dolor y «Melodrama». httpss://www.vice.com/es/article/ev4wpa/sobre-juventud-dolor-y-melodrama

Touros, C. (2018, 31 agosto). Lorde Is The 21st Century’s Author Of Adolescent Evolution. NPR.org. httpss://www.npr.org/2018/08/31/638897130/lorde-is-the-21st-centurys-author-of-adolescent-evolution