(para L, ojalá me leas)  

al despertar de una siesta recuerdo haberte buscado entre las nubes,  el castillo estaba vacío y el eco era inmenso.  

es como si todo fuera contigo cuando sales a caminar.  

te encuentro cerca del lago, admirando el atardecer,  

tratando de olvidar tus miedos y buscando nuevos caminos por andar.  me siento muy cerca de ti, sin tocarte.  

admiro tu meditación y la calma que te envuelve.  

las hojas caen perplejas ante tu cuerpo desnudo;  

el agua corre por tus pies renovando tu espíritu  

y las flores te abrazan nutriendo tus ramas.  

escucho tu alrededor,  

todo respira al mismo tiempo que lo haces tú.  

me uno a la melodía.  

me pierdo en tus recuerdos al caer la noche,  

saludas a las estrellas y la luna te abraza.  

es momento de regresar, las luciérnagas nos guían a casa.  mañana iluminarás el cielo.  

pero hoy, en esta hipnosis sensorial,  

sostengo tu pesar y lo vuelvo polvo.  

algún día germinarán las semillas que sembraste en mi, lo veo en tus ojos.  algún día este beso será una nueva constelación, ¿lo ves en mis ojos?