Edit Content
Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creatividad.
Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creativdad.
freestocks.org/Pexels
Zaira Ingrid Yépez

Zaira Ingrid Yépez

Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Oriente

Soy Ingrid y me gusta escribir acerca de cosas relevantes e irrelevantes pero que llaman mi atención cotidianamente, es una forma de plasmar mis ideas y pensamientos creando escenarios ficticios y unos no tanto, pero que ocupan mi mente.

Diario de un corazón

Número 4 / ENERO - MARZO 2022

Me gusta pensar que algún día lo leerás, así te diré lo que no pude, pero sin decirlo

Zaira Ingrid Yépez

Zaira Ingrid Yépez

Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Oriente

No soy sólo yo y me gusta pensar que algún día lo leerás, así te diré lo que no pude, pero sin decirlo.

Nunca creí llegar a esto… no lo creíamos ni lo pensábamos, o quizás sí, pero preferíamos evadirlo. Pensar en el futuro era algo que hacíamos a menudo, sin embargo, nunca contemplamos un escenario así: cada uno por su lado, parece que finalmente nuestros caminos se separaron y quien sabe si vuelvan a unirse. Como sea, una separación no estaba en nuestros planes y menos una ruptura, todo parece muy fugaz, como aquella noche mirando las estrellas y la luna tan radiante, cuando nos dimos cuenta ya era muy tarde, pero esto es algo que nos ocurría con frecuencia… ¡lo amaba tanto!, contigo perdía la noción del tiempo.

Hoy te digo adiós, también a esa versión que solo yo tenía de ti y me hizo sentir tan bien por mucho tiempo, a todos los sueños, promesas y planes que hice a tu lado, a un futuro juntos y probablemente a toda una vida que parecía resuelta y no era para menos, creo que nunca vi el gran impacto de todo esto como hasta ahora.

Resulta difícil, después de un viaje de más de 1300 días, hemos llegado al final y no ha resultado tan simple bajarse ¿cierto?, puede parecer que sí, pero es todo lo contrario, no imaginas cuán doloroso fue darle tantas vueltas al asunto y no encontrar una respuesta que no implicara separarnos, pero simplemente nunca llegó, nunca la encontré…

Estar fuera de casa tanto tiempo me hizo adoptar una nueva, así que cuando regresé fue tan raro… me sentí ajena y extrañaba lo de antes, pero ¿era un viaje redondo? No, sólo quedaba eso: adaptarse y ya, la vida sigue su curso.

No tienes idea de lo terrible que pasé, lo mucho que hubiera querido ese último abrazo. Si alguna vez pensaste que esto no significaba lo mismo para mí que para ti, si alguna vez te sentiste solo o si alguna vez te herí, hoy me arrepiento de todo lo que pudo traernos a esta situación, siempre te di lo mejor de mí, pero obvio cometí errores.

Te cuento que para distraerme he escuchado música y tal vez recordarás lo mucho que disfrutaba de cierta banda…pues ahora más que nunca sus letras cobran un sentido muy especial, espero que pasando esos 5 días todo vaya mejor.

Ya han pasado 3 días y he mantenido mi mente ocupada, sin embargo, te veo en todas partes, pero eso es todo lo que diré por ahora. He querido contarte tantas cosas que me hicieron olvidar tu ausencia reciente.

Ahora sí, estoy aquí después de una semana que se ha sentido como una eternidad pero apenas es el principio, te confieso que me he sentido mejor los últimos días pero continúo viéndote en cada lugar…

Te volví a recordar en algo muy simple pero que solíamos hacer ambos y ahí caí en cuenta: te extrañé en la madrugada y no porque estaba sola, sino porque extrañara tus conversaciones; era a las 3 de la tarde con tu excelente compañía cuando mejor me sentía. Creo que te dije muchas cosas, pero fueron más las que no, así que ahora con un nudo en la garganta me toca escribirlo y ni siquiera lo verás pero supongo que me hace sentir mejor.

Ya no recuerdo la última vez que escribí aquí. Las cosas en mi vida parecen ir bien, y me alegro bastante, espero que en la tuya igual. Por fin estoy mejor que nunca desde que… bueno ya sabes.

Sólo he hablado de ti y cómo me siento al respecto, pareciera que mi vida gira en torno a esto, pero en realidad he estado muy muy feliz últimamente, tanto, que había olvidado escribir aquí, podría contar a detalle el por qué, pero he dispuesto este espacio para plasmar lo que nunca te dije. Con esto me despido tanto de ti, como de la versión de mí hasta ahora y me queda agradecerte por todo, decirte que marcaste mi vida, me enseñaste muchas cosas, me hiciste muy feliz, me regalaste muchas experiencias y aunque me hubieran gustado que fueran más, te deseo lo mejor.

Lo anterior lo escribí hace poco, y aunque me despedí no lo pude lograr, creí que ya estaba cerrado. No pienses que mis sentimientos por ti desaparecieron, pude comprenderlos, o eso creí, ahora veo que no y no sé qué hacer…

Podría salir corriendo a buscarte, con la posibilidad de no encontrarte, quizá debería arriesgarme pero, ¿en verdad debería? ¿acaso todo lo escrito aquí es verdad?, ¿es todo lo que tenía por decir?, ¿será ficción o el diario de un corazón?

Más sobre Ventana Interior

México a blanco y negro

Por Natalia López Hernández
Matices sobre la desigualdad, el dolor y la rabia

Leer
Amor universitario (y latinoamericanista)

Amor universitario (y latinoamericanista)

Por Christian Osvaldo Rivas Velázquez
El romance y la teoría social se cruzan en C.U.

Leer
Obligación

Obligación

Por Aarón Giuseppe Jiménez Lanza
¿Cuál es nuestro deber en tiempos sombríos?

Leer
Los tolerantes

Los tolerantes

Por Andrés Arispe Oliver
Qué terrible paradoja fue haber tolerado al intolerante

Leer
Agua de sangre

Agua de sangre

Por Antonio Bernal Quintero
¿Hasta qué límites salvajes nos podrían llevar las disputas por el agua?

Leer
El DeSeQuIlIbRiO

El DeSeQuIlIbRiO

Por Carlos Damián Valenzuela López
Un caligrama describe mejor que mil palabras

Leer

Deja tus comentarios sobre el artículo

Diario de un corazón

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

18 − one =