Vamos por partes, ¿qué significa “Generación de cristal”? Según la filósofa española Montserrat Nebrera, se “utiliza para referirse a los jóvenes nacidos después del año 2000, quienes están en la adolescencia y comienzan a alcanzar la mayoría de edad. Aunque el término ‘cristal’ está asociado a la fragilidad de algo que se puede romper fácilmente”.

¿Somos Generación de cristal? Creo que sí. Pero, ¿quiénes son los que se quejan de todo sólo por disgusto personal? ¿Y por qué solo denuncian por redes sociales sin tomar asuntos legales? Si tanto confían en la justicia, ¿por qué la tasa de delitos no denunciados sigue en 93% desde 2019?

Esta generación también dice confiar en los valores, entonces, ¿por qué “cancelan” a gente, cosas, películas, etc.?  Todo sin saber bien qué están “cancelando”. Por ejemplo, el caso de la película estadounidense Lo que el viento se llevó, la cual fue censurada por ser “racista”; lo que no saben es que la actriz afroamericana Hattie McDaniel fue la primera mujer afroamericana en ganar un Oscar. Otro problema que observo es que la gente no comprende que es una película: si en la película hay un personaje racista, no hace al actor racista; si en la película hay actitudes racistas, no es que la película dé un mensaje racista, es porque es parte de la trama. A estas actitudes radicales les tengo un gran rechazo, porque son actitudes impulsivas y sin razonamiento alguno; en estos casos se podría cancelar todo acontecimiento histórico, cuando la mujer no podía votar, épocas racistas, la esclavitud, feminicidios, genocidios, etc. No se trata de hacer como si nunca pasó, ya que de los errores se aprende y como dicen: “el que no conoce su historia está obligado a repetirla”. Está bien tener sensibilidad por ciertos temas pero nunca hay que llevarlo a extremos radicales, es mejor informarse, investigar y ver cuánto ha mejorado la sociedad desde entonces y sentirse orgullosos.

En mi opinión, los pertenecientes a esta generación también privan de la libertad de expresión. Protestan de que los dejes publicar lo que quieran, vestirse como quieran, identificarse como quieran, o llamarles como quieren, pero a alguien con una opinión diferente o “políticamente incorrecta”, automáticamente lo censuran y ahí entra el debate. ¿Quién decide qué está bien y qué está mal? No porque algo no nos parezca lo vamos a censurar, a eso se le llama autoritarismo y un claro ejemplo es Corea del Norte, donde no se puede opinar diferente al gobierno y la sociedad vive en constante control y adoctrinamiento gubernamental, tanto es el régimen autoritario, que los habitantes norcoreanos no cuentan con internet y no pueden viajar a otros países.

Otro punto que difiere con la definición de esta generación es la doble moral, cada uno de los movimientos o ideologías que apoyan van en contra unas de otras, por ejemplo, están a favor de la inclusión, del body positive y en contra del racismo y discriminación, cuando las mismas personas critican a otras por su aspecto físico, creen en la astrología tan radicalmente que comienzan a discriminar por un simple signo zodiacal, ahí, ¿dónde quedan los valores? Y cómo puedo tomarlos en serio cuando ni ellos mismos defienden sus ideales.

La otra problemática que observo en esta generación es la poca o nula tolerancia a la crítica, la frustración y el rechazo; en mi opinión, esto se debe a la clara dominancia de la ignorancia, ellos creen que todo es color de rosa hasta que se encuentran en una situación del mundo real. Los padres hacen creer a los hijos otra realidad distinta a la verdadera, creo que eso es lo que los lleva a quejarse de cualquier cosa y si les das una opinión diferente te insultan y te acusan de muchas cosas solo por opinar, como si eso lo convirtiera en verdad absoluta. El anonimato de internet es la principal base de que todos digan lo que piensen sin miedo a las consecuencias.

Para mí sí somos la Generación de Cristal, pero la definición que le daría, sería: la generación que basa su vida en redes sociales y quejándose ahí mismo sin repercusiones en la vida real, una generación que no para de quejarse sin dar soluciones, donde ser inclusivo tiene otro significado, donde la justicia tiene otro significado, donde problemas realmente severos se dejan a un lado por otras preferencias ideológicas; la generación donde la opinión más popular o aceptada por la mayoría se convierte en un régimen autoritario.

Para mí es válido y respeto tu género, tu orientación sexual, tu opinión, tu persona, tus ideas, lo que no es válido es que excluyas a personas con otras ideas o ideales diferentes a las tuyas solo por cuestiones personales. Claro que hay de opiniones a opiniones, mientras no haya un daño real a la sociedad no deberías tomarle importancia.

Piénsalo, ¿te parece que realmente estamos dando el mensaje que queremos dar? ¿Realmente somos la generación del cambio? ¿Ese cambio beneficia a la mayoría? ¿Ese beneficio es justo?