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Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creatividad.
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Ana Cesia Martínez Moreno - Escuela Nacional Preparatoria Plantel 9
Katia Lara Vargas

Katia Lara Vargas

Facultad de Filosofía y Letras

Soy estudiante de música y de filosofía, apasionada del arte y la política, apasionada de sentir.

Magenta

Número 6 / AGOSTO - OCTUBRE 2022

Horóscopos y signos del color

Katia Lara Vargas

Katia Lara Vargas

Facultad de Filosofía y Letras

Los sentimientos son colores, bien a bien no distinguen entre uno y otro, hasta que son excesivamente evidentes las diferencias. Los colores son más que un fenómeno óptico, son la puerta a saber cómo te sientes, cómo te ven los demás. No todas las personas hemos aprendido a distinguir entre los matices de nuestra alma, ya que las diferencias suelen ser difusas. Suelen marcarse más con el tiempo, o algunas otras se transforman. Te aceptas a ti como ser humano que eres cuando entiendes cómo manejas tu propia paleta de colores; emoción y color siempre están conectados, proyectamos un color y el entorno reacciona ante él.

Si nos vamos a aspectos técnicos de teoría de color, podemos ver que el color es la impresión producida por un tono de luz en los órganos visuales, o más exactamente, es una percepción visual que se genera en el cerebro de los humanos y otros animales al interpretar las señales nerviosas que le envían los fotorreceptores en la retina del ojo, que a su vez interpretan y distinguen las distintas longitudes de onda que captan de la parte visible del espectro electromagnético. En resumidas cuentas, el color no existe, es una percepción causada por nuestra mente a través de las longitudes de onda; cualquier color que observes no es el real, es de todos los colores menos del que ves, ya que absorbe todos los colores menos el color que percibimos.

Vemos el espectro de luz visible en un campo electromagnético. Nuestro espectro visible va de 400 a 700 nanómetros, lo hacemos a través de los bastones y conos, hay 3 conos, uno percibe los rojos, otro los verdes y otro los azules. A partir de esa percepción podemos ver todos los colores, o casi todos.

Con ayuda de especialistas, autoconocimiento y tiempo he alcanzado a distinguir los colores principales en pigmento y en mi mente, y sin querer, le dan más sentido a todo desglosando uno por uno:

Azul

El azul se ve lejano y alto, es porque lo asociamos con el mar y el cielo, es un color que en cualquier acorde cromático tiene una connotación positiva, es el color de las vírgenes, de la amistad, de la empatía, pero también lo asociamos a la tristeza, la música blues se llama así porque evoca un sentimiento de melancolía y tristeza musical. El azul lo siento muy de adentro, como si fuera una lanza que poco a poco se mete más en uno, es el color de las lágrimas, se siente en la garganta, es aquello que no puedes controlar pero sientes como poco a poco tus ojos desbordan de lágrimas que no puedes parar, es llorar hasta sentir que no tienes aire, es una tristeza donde puedes llorar horas y horas, donde nadie encuentra una razón para sentirse así, y a veces no la hay, solo te sientes azul, y lloras, lloras como nunca habías llorado en tu vida, sacando todo lo del pasado, el presente y el futuro, el azul es el color de las cosas gigantes, pero también el azul se siente como la esperanza, como la libertad e incluso como la ilusión.

Rojo

El rojo se siente cercano y bajo, el rojo nunca queda en segundo plano, siempre refleja cercanía, es el color más caliente, representa lo material, y sensaciones muy fuertes, incluso dicen que el rojo es el blanco perfecto, el rojo es algo que no puedes evitar, te invade, te llena y no puedes escapar del rojo, el rojo es para correcciones, avisos, cosas importantes o peligrosas, es estimulante y extrovertido, es símbolo de la pasión y del amor, el color de la justicia, de la lucha, el movimiento socialista, la república popular china, se extraía de las cochinillas, por eso se le llamaba carmín. Es un color que se siente en el estómago, se siente esa furia, esa rabia que sube a tu cabeza y te hace casi no pensar, es como un golpe desde adentro, son las uñas apretadas en tus manos que casi no puedes parar aunque te estás lastimando, es ese grito de enojo, es la rabia del coraje, son esas lágrimas que estás a punto de soltar pero te tragas, es acidez estomacal, es el deseo de golpear, de dañar, es el impulso más fuerte de lo humano. Pero también es entrega, es pasión es el calor y la cercanía humana en especial de la pareja, el rojo es la lucha, la rabia a que todo sea mejor, a darlo todo sin importar que tanto pierdas, el rojo es fuerte, es cercano, caliente, quemante y bello.

Morado

El morado nace como un tinte extremadamente caro, el gramo costaba 2000 euros, porque los pigmentos eran totalmente naturales, era tomado de los moluscos, en la antigüedad vestir de morado era un privilegio mayor que llevar oro, y solo ciertos grupos sociales se pueden utilizar ropas moradas, tanto que Cleopatra pintó la vela de su barco de color morado para demostrar su poder. Es un color muy interesante, ronda entre la sensualidad y la espiritualidad, es el color del apego, de la amistad, es esa sensación de tranquilidad que te inunda cuando terminas de llorar y sientes paz, es sentir que puede seguir, pero no es feliz, es como un vacío interior esperanzador pero que duele, es el color de la división del bien y el mal, es el color de la fantasía y de la magia.

Amarillo 

Es el color más chillón y más contradictorio, lo relacionamos con la alegría, a la luz y al oro, pero también al ácido, subrayamos en amarillo, llama la atención, es el color de la euforia, de esa sensación de caballo desbocado que no puedes detener, que te lleva más allá de tus limites pensados, esas ganas de que nada pare, de que lo das todo, es el color de la emoción y la sorpresa, es el color de la luz, los pintores nunca ponen luz con un blanco puro, siempre le agregan aunque sea un poco de amarillo, es esa luz de la vida no siempre positiva, es el empujón de alguna emoción extensa que te recorre por las venas, emana del cerebro pero vibras en forma de un grito, una risa, una sonrisa, son aquellos momentos que te permiten seguir pero que a la vez te hacen perder el control.

Verde

Representa la juventud, la vida sana, la naturaleza, es un color que con un poco de otro que le agregues cambia totalmente, hay tonos de verde preciosos y otros horribles, se siente como la tranquilidad, es bella pero con un poco de otra sensación se va, a veces son las sensaciones del futuro que te impiden disfrutar un verde puro, se siente vivo, se siente libre, pero a la vez da la mayor ansiedad del mundo porque se siente efímero, no te da seguridad, no te da plenitud pensar en él ni atarte a eso, porque de la nada se va, es como un color que sientes que no mereces, que a veces está y te sientes más vivo que nunca, y luego se vuelve un infierno viviente, un color horripilante, un verde cenizo, verde hoja muerta, que es la otra cara del verde, lo solemos asociar a lo diabólico o a lo venenoso, a la maldad y la mentira.

Negro

El negro no es propiamente un color, es la ausencia de color, es el color de la juventud, la muerte, la elegancia, el rechazo al deseo de llamar la atención, es el color de la individualidad, el color del duelo, la linea del bien y el mal, el día y la noche, puede ser misterioso y mágico, casi siempre es el color de lo malo. Se siente como la sensación de desear con toda tu alma desaparecer, es aquello como la mezcla de todo, la ausencia total de luz, la oscuridad, es más un efecto óptico que un color, se siente solo, se siente frío, se siente como el último adiós, como una llaga en el alma que eres incapaz de sacar pero no te mata, solo duele constantemente, es el color y el sentimiento más fuerte y más terrible de explicar.

Blanco: es el color de la perfección, el color más importante para los pintores porque no hay mezcla que te de el color blanco, es el inicio, la resurrección, lo limpio, el color de muchos dioses, es la inmortalidad, todo tiene más luz, es el abrazo del perdón, es un calor en el pecho de la esperanza y de volver a empezar, es la rendición, lo opuesto al negro, es libre, pero a la vez da miedo, porque es como tener un lienzo literalmente en blanco donde tienes la obligación de volver a empezar.

Naranja

Es un color muy infravalorado, es el color que más se asocia a sabores y olores, complementario al azul, es un color fantástico, casi no existe en la naturaleza, por eso casi siempre se asocia a la modernidad, a lo juvenil, se siente como un rojo suave, un casi amarillo, es una felicidad que no termina de ser, es aquello que sientes que está pero no del todo, se siente en el nerviosismo de las manos, se siente tan bonito que a veces da paz o tan feo que luego se vuelve tristeza, es un punto intermedio entre sentirse bien pero no del todo.

Rosa: Nace del rojo y blanco, encanto, amabilidad, sentimentalismo, es un color asociado a la piel, al olor de la rosa, está en el acorde de la seducción, es un color tierno, pero a la vez es el pequeño rojo, es un color tibio, como que no llega a ser, ronda en lo tierno pero un poco simple, es como dejar la vida pasar, un dia bueno pero en el que no te sentiste vivo, es sentir la existencia como el vaivén de las olas, solo dejándote llevar sin penetrar jamás en una emoción sentimiento o deseo, es solo estar, a veces se disfruta pero a la larga sientes que el rosa te esta quitando tu esencia, tu vivacidad, te haces polvo lentamente sin que te des cuenta.

Todos los colores se sienten diferente, vivimos diferente, pero hay un color que no existe en la gama de frecuencias, el color magenta. El magenta no puede ser generado por una sola longitud de onda lumínica, por lo cual no existe en el espectro de luz visible. Para que se produzca es necesaria una mezcla de longitudes de onda del color rojo y del color azul, tu cerebro mezcla las dos longitudes de onda y “se inventa” un color nuevo. El magenta es sereno, digno,lleno de gallardía, madurez, fascinación, imaginativo, valiente, se adapta perfecto a los esfuerzos creativos, se siente… solo se siente. Es transformista, liberador, autonomía, único, es la utopía sentimental, pero no existe por sí mismo, sólo existen los colores de nuestra pura esencia humana, pero eso es lo más bello del mundo, somos matices de aquella paleta de colores, esperado poco a poco irnos desviando a lo extra espectral, poder ir dando espacio a la gente para conocer sus colores, donde cada persona tenga sus tonos, sus matices, a veces tan azules, rojos, rosas, morados, y tal vez algún día, iremos sintiendo más magentas.

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