Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creatividad.
Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creativdad.
David Bartus | Pexels.com
Picture of Victoria Isabel Arce Hernández

Victoria Isabel Arce Hernández

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

Soy una mujer trans estudiante de antropología, me gusta mucho escribir y quiero compartir un poema.

Abandonada

Número 17 / ABRIL - JUNIO 2025

Ningún deseo será el que cese mi ciega devoción

Picture of Victoria Isabel Arce Hernández

Victoria Isabel Arce Hernández

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales

La oscuridad acoge mis fragmentos,

pues del saber del frío de la noche es este sentimiento.

 

“Abandonada”

 

Escucho desolada, cual barco hundido entre arrecifes,

¿en cuántas palabras podría ocultar mis sentires?

Sin importar el peso del olvido, sigo aquí,

desesperada porque me mires.

 

“Abandonada”

 

Que me mires, y que sin que suelte palabra

sepas la macabra duda en la que inerte mi mente se “encontraba”.

 

“Abandonada”

 

Encontrar, ¿abandonada es sinónimo de perdida?

Pienso, en afán de buscar un seudónimo para la herida.

Si estoy perdida significa que podría ser hallada, pero jamás, pues nadie me buscaba.

 

“Abandonada”

 

Me repite el silencio cuando observo la nada, el creciente desprecio que genero cuando desesperada busco una razón para estar…

 

“Abandonada”

 

Perturbando mi mente: un comentario, un chiste o una mirada. Lo que sea necesario para decirme que no seré amada.

 

“Abandonada”

 

¿Pero quién me abandonó?

¿Dios? ¿Un amor? ¿O todo aquel que me dejó?

Sé quién no, el temor. Ese que me forjó, que me enseñó a sobrevivir pero no sobre vivir. 

No me dejó, ni cuando sollozaba.

 

“Abandonada”

 

Repite cruel el vacío, trayendo mi mente fiel al olvido devuelta. Olvido al que sola me

condeno, sin importar si es amigo, amor o el ajeno quien me llama.

¿Y quién me llama? Si me encuentro…

 

“Abandonada”

 

Sigo buscando desesperada ese amor que encienda la llama, mi corazón lo aclama angustiado, gritando. Deseando sentirse amado. Especial, encontrado, no abandonado, necesitado.

Un amor o una razón, cualquier lógica o mecanismo: teológica, antropológica, psicológica o

delirica. Siempre lo mismo.

 

Un motivo de mi vivir, una voz que suplique mi existencia. Alguien que desee mi presencia, no solo mi “no ausencia”.

 

Mi presencia Pídeme; que me quede, que te bese, que te abrace, que te rece.

Ningún deseo será el que cese mi ciega devoción.

Encantada, arrastrándome te daré lo que me pidas para dejar de sentirme…

 

“Abandonada”.

Más sobre Ventana Interior

AI-Line

AI-Line

Por: Jorge Alejandro Hernández Jauffred
La ilustración de los sentimientos

Leer
Opción uno y opción dos

Opción uno y opción dos

Por: Raquel Alducín Lira
El día que elegí vivir…

Leer
¿Quién eres?

¿Quién eres?

Por: Yuliana Serrano Valdez
Si no aprendemos a ponerte freno quizá acabemos rogando consuelo

Leer
Secuencias de voces: auxilio

Secuencias de voces: auxilio

Por: María Esther González Paredes
Escribo esto porque presiento que pronto me convertiré en cero

Leer
Zánganos.zip

Zánganos.zip

Por: Álvaro Pérez Texco
La IA no podrá igualar este poema ni en el proceso creativo ni en el resultado

Leer
Arte en extinción

Arte en extinción

Por: Raquel Noyola
La IA nos vacía de creatividad y nos empuja a lo ordinario

Leer

Deja tus comentarios sobre el artículo

Abandonada

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

15 − four =