Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
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Cira ha pasado toda su vida creyendo que algo le faltaba,
cree que su existencia no ha sido de vital importancia.
(Así como también ha creído en muchas cosas que la dañan)
I.
Ha romanizado su vida de mil y un maneras
esperando que alguna sea la correcta,
pero con el tiempo todo ha ido cayendo:
lágrimas, palabras, la esperanza, la culpa…
Una monotonía la sigue consumiendo,
es como si todo, y nada, pasara.
A Cira no le sorprendería que un día todo
se desborde, y que de tanta lágrima se haga
un mar, le da miedo porque, a día de hoy,
no ha aprendido a nadar entre tanto sentimiento.
Todo vicio le ha parecido un buen escape,
pero cuando no encuentra nada de eso
¿cómo afronta la realidad sin querer explotar
en llanto?
Ya casi no hay medicamento, sabe que desde
hace mucho su mente no tiene un freno
¿ahora cómo se supone que calmará todo lo que
lleva dentro?, ¿cuánto tiempo más va a pasar?
(Se lo pregunta a diario)
II.
Cira creía saber lo que era la culpa
y un corazón roto
pero no estaba ni cerca de ello.
Se ha pasado la vida lamentando pérdidas
sumamente absurdas, pero ninguna había
dolido tanto como aquella
(ni siquiera la suya)
Ha sido la clase de herida que no necesita
sangrar para hacerla llorar,
también sabe que es el tipo de herida
que quizá no va a sanar.
III.
El día de la entrega lo sintió cerca,
pero sus peores miedos tuvieron mayor
peso y todo se lo dejo a la suerte.
A fin de cuentas, Cira sigue siendo
la niña con miedos, aquella que se
encuentra en el rincón de la habitación,
abrazándose, esperando que todo pase.
Ahora solo la vida, el universo,
e incluso Dios, sabe que lo que hizo
fue por su bien.
IV.
Todo lo que Cira no sabe de ella es
lo que la acabará atormentando el
resto de su vida.
El vino ya se ha acabado, pero
el sufrimiento sigue ahí,
aún no ha aprendido a afrontar
tal pérdida
(aunque eso ha sido lo de menos)
Ahora ya no tiene noción, ni control,
sobre sus emociones,
se aferra a la tristeza como si de ello
fuera a salir algo bueno,
“A lo mejor de mis propias
cenizas he de resurgir” dice.
V.
Dice Alberto:
“Yo creía ser cuidado,
y cuidador”
Cira cuida de todxs
menos de ella misma.
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