Escuela Nacional Preparatoria Plantel 9
Escuela Nacional Preparatoria Plantel 9
Si tuviera que definir qué es el amor, diría que es algo tan efímero y eterno a la vez que raya en lo incomprensible. Un día te inunda por completo, y al siguiente, te desgarra las entrañas y te arrebata el aliento, como si la vida misma se escurriera entre tus dedos. Es ese impulso de arrancarse el corazón para ofrendar a alguien, o de romper tus venas solo para dejar de sentir.
Dicen que el corazón no es más que un músculo que bombea sangre, pero quienes lo afirman nunca han sentido cómo late con tal furia que parece querer escapar de tu pecho, desesperado por correr tras alguien. Quizá eso sea el amor, o tal vez solo una ilusión tejida por la esperanza y el deseo, por ese torrente de oxitocina que inunda hasta el último rincón de tu cuerpo, desde la punta de los dedos hasta el cabello más rebelde.
El amor es flotar entre nubes, perderse en una sensación tan dulce que las palabras se quedan cortas. Es irónico que algo tan fácil de sentir sea tan difícil de explicar. Quizá sea una de esas preguntas sin respuesta, como cuando alguien me mira y me pregunta: “¿Qué es el amor?”.
El amor es un huracán de emociones, tan intenso y abrumador que desafía cualquier descripción. Es como intentar pintar un color que no existe o capturar un sonido que nadie ha oído. Y, sin embargo, aunque las palabras fallen, todos lo reconocemos cuando nos golpea el pecho.
Por: Jaziel Arath Hernández Salazar
Cuando las ideologías no se someten a una reflexión crítica pueden nublar el juicio moral y racional
Por: Jesús Ponce
Ave del México prehispánico, ¿por qué nadie la recuerda?
Por: María Fernanda Cuenca Hernández
El patriarcado, la heteronorma y la religión
La Magdalena Con el afán de cambiar aquello que creemos, para poner cada cosa en su lugar, y recordando que la historia la cuenta quien más poder tiene, me gustaría reivindicar a María Magdalena: aquella mujer que, por serlo, quedó en un limbo, por ser más de lo que se …
Por: Ana Paulina Herrera Hernández
La política y la religión siempre generan controversia