Nota introductoria: Cabe aclarar que este texto está hecho solo en base a mis ideas opiniones y conocimiento empírico, no he consultado ninguna fuente de ningún tipo. Solo es uno de los muchos pensamientos que he tenido cuando estoy filosofando y me gustaría compartirlo. Tampoco vengo a decir en qué deberían creer todos y en qué no, como dije con anterioridad, solo es mi opinión.

Como mexicanos, la religión siempre ha sido un factor influyente en nuestra vida y sociedad, aún si no somos creyentes, nos vemos rodeados de una nación apegada a sus costumbres y educada en base a sus creencias. Esta cultura que tenemos es consecuencia de la Conquista española, que sucedió ya hace 500 años; fuimos esclavizados e impuestos a una nueva religión que debíamos seguir para no morir por “herejía”; esa educación de que la religión es de lo más esencial del mexicano ha perdurado hasta la actualidad.

Sustentaré esta idea diciendo que la “virgen morena” fue una versión de la virgen impuesta sobre el antiguo pueblo mexicano por los españoles, con el objetivo de que los mexicanos se vieran identificados con ella y cumplir con el propósito de imponer una religión sobre un pueblo ya creyente, es obvio que este propósito fue cumplido con gran éxito, ya que la “virgen morena” sigue siendo un ícono religioso con el que miles de familias mexicanas están

apegadas, aún después de 500 años de Conquista.

Esta cultura de tradicionalismos y costumbres se ha visto cada vez más opacada por movimientos y sucesos tales como la Ilustración, el Renacimiento, la Revolución francesa, etc., los cuales eventualmente han causado que el conocimiento se haga de todos, difundiendo formas de pensar distintas, alejando a las nuevas generaciones cada vez más de la religión, provocando la hegemonía de la cultura del conocimiento, que crece de forma exponencial sobre lo romántico.

Como parte de una familia creyente no tan activa en dicho ámbito, creo que poseo una breve idea sobre cómo se ve la comunidad religiosa en sí, todo su ambiente, comunidad y simbolismos que brindan un fuerte sentimiento de alegría, paz y unión cuando la comunidad no es tan cerrada. Ya que, comportamientos agresivos y violentos sólo generan una visión negativa sobre las personas creyentes y la religión a la que siguen.

Hablar sobre Dios…

Siendo honesto solo soy creyente en que existe un dios, pero no considero que sea como es representado en cualquiera de las religiones que he llegado a conocer. ¿Por qué digo esto? Lo digo porque considero que nunca podremos saber realmente “¿Qué es dios?” (involucrando su propósito, función y apariencia). Argumentaré esta idea diciendo que cada religión tiene una representación de dios hecha a su propia imagen y semejanza, por ejemplo: los hindúes tienen dioses parecidos racialmente a ellos, los chinos también, los mexicanos también, etc. Considero que eso demuestra que el ser humano tiene un ego tan grande que hasta se cree a sí mismo el epítome de la creación y creó una imagen de un ser omnipotente y omnipresente a su semejanza.

No considero que lo que llamamos dios posea una forma definida, o que es un ser omnipresente y omnisciente; tampoco creo que sea un dios que da lo justo o lo necesario, yo creo que visualizo a dios como el universo en sí, solamente existe y forma parte de todos en todo momento y lo hará por siempre, esta versión de dios que tengo no da o quita, ni beneficia al bueno o castiga al malo, solamente es parte de su propia creación, sin alterar ni una sola cosa, dejando así todo el peso de todas nuestras acciones sobre nosotros.

No creo que podamos realmente concebir la idea de dios en algún momento, siempre pensamos que tiene un plan perfecto para todo, pero… ¿acaso es realmente un plan perfecto pensado por seres imperfectos, perfecto en su totalidad?

Lo que nos da un sentido y lo que pensamos que pasa después de la muerte

La religión brinda un propósito a la gente, les da sentido a nuestras vidas; por el contrario, si pensáramos que no pasa nada después de la muerte, que solamente ya no existimos y volvemos a ser parte del universo que nos dio a luz, le estaríamos quitando su sentido y valor a todo lo que nos hace felices, a todos nuestros logros, lo que hemos vivido y los esfuerzos que hemos hecho por conseguir algo que anhelamos. Sin embargo, el pensar que ser buenos nos llevará al cielo y ser malos y pecar al infierno, nos da un sentido de ser y actuar, ya que se nos afirma que el cielo es el máximo plano de existencia, que siempre viviremos en una constante de armonía y felicidad, pero ¿nos cansaríamos también se eso?

Con la forma de vida que llevamos queda demostrado de que nos solemos cansar de la rutina y de hacer lo mismo de forma repetitiva constantemente, puede incluso resultar que el cielo que se nos promete en textos como La biblia es muy emocionante al principio, pero siempre cabrá la posibilidad de que dejará de serlo en algún momento. Aunque claro este es un ejemplo muy burdo, este tipo de cosas no son las únicas que nos dan un sentido de ser.

Un poco de divagación

Quisiera recordar que: Todo en la vida es relativo, ningún conocimiento perdura si no está bien argumentado, lo que tu consideres correcto probablemente no lo es en otros lugares, ninguna moral, ética y corriente de pensamiento realmente es la misma en todos lugares, así que debemos ser capaces de adaptarnos a cualquier lugar que vamos, porque siempre habrá personas con costumbre e ideologías distintas en todas partes que nos ayudan a definirnos como personas y miembros de una sociedad. Para rematar quiero decir que la vida es una gran contradicción, todo se contradice de alguna manera: todos nacen para morir, todas las personas piensan distinto, lo que tu crees correcto no lo es. Me gustaría vivir en una sociedad donde por lo menos el caos que suele ser la vida se viera reducido en nosotros al abordar nuestras discusiones y problemas de forma más tranquila.

Yo considero que es importante tener en mente que nadie realmente entenderá del todo nuestros puntos de vista, por lo tanto, es recomendable tener eso en mente al probar cosas nuevas. Debemos mantenernos abiertos mentalmente a las formas de pensar de los demás antes de hacer cualquier juicio contra lo que no te parece correcto.

Sobre mi redacción

Este texto, además de ser un trozo de mis pensamientos y mí ser, es una invitación para quién llegue a leer esto, una invitación a analizar su realidad, lo que considere absoluto, bueno o verdadero y mantenerse abierto al conocer cosas nuevas todo el tiempo, ya que todo el mundo tiene ideologías, pensamientos, experiencias y estilos de vida distintos.

No quiero causar un conflicto interno en los demás, al contrario, pido que disfruten de la vida que tienen, que se sientan afortunados de vivir en un mundo imperfecto, lleno de contradicciones, ya que eso es lo que también nos da sentido.