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Arturo Andrew Pérez Diego

Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Vallejo

Semblanza

La magia del mañana

Número 2 / JULIO - SEPTIEMBRE 2021

The Joy tendría un hijo en medio de una guerra

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Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Vallejo

El 26 de julio de 1965, el buque estadounidense Savannah se dirigía a la costa de Vietnam junto con la flota armada del trigésimo quinto cuerpo de marines, enviados para brindar apoyo de artillería, ejecutar operaciones especiales y entregar suministros.

En el navío había una tripulante embarazada. De origen asiático, antes del embarazo ya formaba parte de la unidad de inteligencia e infiltración, un equipo de operaciones especiales llamado NOX. Por la naturaleza de su trabajo tenían nombres clave. Ella era The Joy (La Alegría) y tuvo un romance con un miembro de su unidad, cuyo nombre en clave era The Sorrow (La Tristeza). Su relación germinó debido a que su trabajo nunca les permitía tener un hogar al que regresar. Sólo iban juntos de misión en misión. Durante una incursión en las islas de Shellsel, ambos estuvieron varados por dos meses. Ahí fue donde The Joy se embarazó.

En esa infiltración ya los esperaban, por lo que tuvieron que modificar la misión de recabar información, por la de destruir las instalaciones enemigas en caso de ser descubiertos, lo que los dejó sin ruta de escape, pues debieron usar el motor de la pequeña lancha en la que llegaron como medio de combustión y detonarlo con explosivos para perforar el recubrimiento de acero de un generador de la planta eléctrica. La explosión en cadena llegó a los depósitos de combustible y al astillero, inutilizando los vehículos marítimos. Esa acción los dejó ocho semanas en esa isla.

Después de ese tiempo, un helicóptero fue a rescatarlos. Los demás oficiales de la unidad quedaron sorprendidos, pero no porque la pareja siguiera con vida, sino porque The Joy tendría un hijo en medio de una guerra.

Al regresar y reanudar comunicación tras dos meses con el líder de la unidad NOX, cuyo nombre clave era El Filósofo, éste ordenó ejecutar a The Joy y, por ende, a su hijo, ya que mostrar afecto estaba prohibido dentro de la unidad, así que mantener un romance e incluso procrear era peor que una insubordinación.

Su pareja, The Sorrow, se quedó sin palabras, pero justo antes de que se emitiera la orden de ejecución, asumió toda la responsabilidad, para que The Joy pudiera vivir. El Filósofo no estuvo interesado en sus palabras, pero luego recapacitó. Aceptó ejecutar a The Sorrow, pero con condiciones. The Joy no había pagado por completo sus errores, la muerte era para ambos. Así, daba igual si The Sorrow se sacrificaba; sin embargo, The Joy era la mejor de la unidad, así que para salvar su vida ella debía matar a quien amaba. Y no sólo eso: debía seguir cumpliendo misiones inmediatas antes de parir.

Ya con cuatro meses de embarazo y con dificultades para desplazarse, The Joy se apresuró a matar a The Sorrow. En un puente lo tomó por el cuello y lo arrojó a un desfiladero de 50 metros de altura. El resto de la misión fue un éxito y consistía en recuperar documentos robados por los soviéticos. Ella se mantuvo alejada de sus superiores durante el tiempo restante hasta dar a luz.

Con The Joy a punto de parir, y en una misión de desembarque, los marines comenzaron a utilizar napalm para aniquilar al enemigo, por lo que The Joy tendría que cubrirse mientras el USArmy tomaba la costa. En su estado vulnerable, The Joy tuvo mareos e incluso delirios. Llegaron helicópteros del Vietcong para atacar al desembarque y aniquilar a los estadounidenses, cumpliendo con su cometido. The Joy, ahora inútil en combate, huyó como pudo de la costa y se adentró en la selva. Casi no podía moverse y cada vez los dolores eran más fuertes. Buscó un lugar medianamente seguro donde poder tumbarse al suelo y luchó por mantener la lucidez. Esa noche fue insoportable, tenía un dolor que casi la desmayaba, se escuchaba la guerra en la lejanía, la gente calcinándose y gritando por la eficacia letal napalm.

Finalmente, a la mañana del día siguiente, el 27 de julio de 1965, tuvo una hija. The Joy se convirtió así en la única mujer en dar a luz en el campo de batalla.

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