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En estas trincheras nuestras armas son palabras convertidas en argumentos y contra argumentos.
En estas trincheras nuestras armas son palabras convertidas en argumentos y contra argumentos.
Elizabeth Ruiz / Cuartoscuro.com
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Valeria Sofía Cruz Martínez

Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Vallejo

Mi nombre es Valeria Sofía, prefiero que me llamen Sofía o Sofi. Vivo en Teotihuacán, Estado de México. Me considero una persona inteligente y estudiosa. Me gusta mucho ir a la escuela porque conozco gente nueva cada día y vivo experiencias únicas, también porque me gusta aprender; veo la escuela como algo divertido, no como una obligación, por esa razón disfruto bastante mi estadía ahí. Me gusta pasar tiempo con mis amigos y conocer lugares y gente nueva.

Capitalismo y echaleganismo a la mexicana

Número 7 / OCTUBRE - DICIEMBRE 2022

El mantra del capitalismo: échale ganas

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Valeria Sofía Cruz Martínez

Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Vallejo

La teoría económica del capitalismo está mal vista por la mayoría de las personas. Desde el ámbito privado, al poseer éste los medios de producción y estar financieramente acomodado,se tiene una percepción de ser el patrón que solo utiliza la fuerza de trabajo de los obreros para generar riqueza propia, viéndolos simplemente como un ente productor para su propio beneficio.

Por otro lado, desde el ámbito público, está muy marcada la línea entre los de “arriba” y los de “abajo”, donde los primeros siempre mandan y toman decisiones y los últimos deben acatarlas, estén o no de acuerdo.

Claro que gran parte de las personas desearían ser dueños de una empresa o titular de cualquier institución para tener una condición socioeconómica estable, brindar empleos, generar riqueza o ejercer un poder económico que asegure un progreso tanto personal como laboral. La gran mayoría de las personas quisieran esa oportunidad.

Sin embargo, lamentablemente esa oportunidad no siempre está al alcance de cualquier individuo. Vivimos en una sociedad en la cual se obliga a seguir estrictamente la línea de ir a la escuela, completar un nivel básico, medio superior y superior para prepararse para la vida y poder así enfrentarse al mundo laboral.

Según el último censo realizado por el INEGI en el 2015, que mide aspectos educativos a nivel nacional, indica que 5.8% de la población total de México (incluyendo mujeres y hombres) son personas analfabetas; esto quiere decir, que no obtuvieron algún tipo de educación.

Con lo cual podemos deducir que no todas las personas tienen la oportunidad de tener una formación académica (ya sea pública o privada), por ende, les será más complicado acceder a una oferta laboral decente que te remunere lo justo por el trabajo que se desempeña, es decir, en términos de igualdad de oportunidades existen sectores muy marginados.

El famoso “échale ganas” en el discurso mexicano no basta hoy en día por diversos aspectos como la falta de oportunidades, afectando principalmente a jóvenes recién egresados de nivel superior o personas que cuentan con una profesión.

Por otro lado, los empleos no siempre son bien remunerados, y menos para profesionistas que no han podido acceder a esa oportunidad y ejercer los conocimientos adquiridos en sus años académicos.

“Échale ganas” es una forma de expresar que no hay de otra, que es necesario siempre dar mucho más de lo que eres capaz, que siempre hay que buscar y buscar hasta encontrar. Ciertamente es válido, ya que de no hacerlo caeríamos en el conformismo, no obstante, se ha convertido en una especie de cultura tradicional en el México moderno.

Echarle ganas debe ir más allá de una zona de confort. Debe ser una frase de aliento, unas palabras para dar ánimo y que realmente motiven a la persona, y no para dar a entender que esto es lo que hay, que hay que conformarnos con ello y que es muy difícil de cambiar.

Para poder echarle ganas se tiene que pensar en cómo generar esas verdaderas oportunidades que garanticen un crecimiento laboral y económico real y no que se limite a la imaginación de poseer tu empresa o ser un alto funcionario con una vida financiera sin preocupaciones.

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Capitalismo y echaleganismo a la mexicana

4 respuestas

  1. Muy bien mi niña que manera de ver y decir lo que en realidad está pasando , felicidades y pa delante un abrazo!!!

  2. Excelente reflexion y muy acertada, asi es.. “echale ganas”…las ganas la echamos siempre asi somos los mexicanos, pero…y las ganas de crear oportunidades de los los gobiernos donde estan…

  3. Estoy de acuerdo con que algunas personas se ven limitadas para adquirir una preparación académica. Sin embargo en el México de hoy, el conocimiento está a tan solo un clic de distancia. Necesitamos formar a los mexicanos con una mentalidad no de conformidad o limitarlos a ser empleado de alguien más. Implementar dentro de la primer escuela que es el hogar, la mentalidad de empresario. Trabajar no es solo servir y cambiar tu tiempo por dinero. El dinero es una consecuencia del esfuerzo trabajado día a día. Echarle ganas va más allá de un concepto de “es lo que hay o es lo que toca” Es un hoy quiero ser mejor persona que ayer y el único responsable de cambiar su realidad es uno mismo. Hoy decido cambiar mi realidad, esforzarme más, hacer lo que me gusta, disfrutar el proceso, tener la voluntad de superarme cada día.

    Execelente artículo. El cambio empieza por pequeñas acciones que se convierten en disciplina para la vida.

  4. Me encantó el trabajo, me encantó la reflexión de la autora, me parece un trabajo profundo y muy conciso de lo que representa el país y la problemática de los jóvenes ante la incertidumbre que pesa sobre ellos después de egresar de sus estudios profesionales y anima a que los jóvenes talentos que requiere el país se superen y logren sus metas. Felicitaciones

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