Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creatividad.
Esta ventana es para mirar dentro de nosotrxs a través del arte y la creativdad.
crédito: Ilse Morales González / Escuela Nacional Preparatoria 9
Picture of Idílica

Idílica

Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Vallejo

Soy Idílica, me apasiona escribir, abriéndome un mundo de posibilidades, las palabras pueden darte ese sentimiento de pertenencia. El mensaje de “No es nada” que quiero transmitir, es que como mujeres nos la pasamos diciéndonos que los problemas que tenemos, no son nada o poca cosa; esto se transmite también al problema de la mujer en la sociedad, donde sufrimos abusos, acosos y llegamos a perder la vida. Nosotras lo somos todo, somos ese amanecer y atardecer lleno de colores, esas lunas que nos regala el cielo nocturno, somos ese campo de flores; nosotras somos el ayer, el hoy y el mañana, simplemente somos mujeres.

No es nada

Número 9 / ABRIL - JUNIO 2023

Como mujeres nos la pasamos diciéndonos que los problemas que tenemos, no son nada o poca cosa

Picture of Idílica

Idílica

Colegio de Ciencias y Humanidades Plantel Vallejo

Cuando me desperté y sentí la sensación de vacío en mi interior. “No es nada”, me dije.

Mientras mi amiga me preguntaba mi asistencia y sentí la necesidad de cancelar. “No es nada”, me dije.

Después de que mi mamá dijera que me cuidará y yo sentía la necesidad de refugiarme en sus brazos. “No es nada”, me dije.
En lo que escogía mi ropa y sentí mis piernas temblar. “No es nada”, me dije.
Cuando le escribí a mi novio que ya me iba y en mi mente pensé que era la última vez que hablaría con él. “No es nada”, me dije.
En el transporte, cuando me alejaba de mi casa y más nervios tenía. “No es nada”, me dije.
En el momento que vi el metro vacío y tuve la sensación de que alguien me miraba. “No es nada”, me dije.
A pesar de que la calle no era transitada, pero era el camino más rápido y sentí la sombra de alguien. “No es nada”, me dije.
Aunque me atrapó y me llevó a una casa vacía. “No es nada”, me dije.
Tan pronto como empezó a despojarme de mi cuerpo y mi alma. “No es nada”, me dije.
Mientras pasaban los días y yo sentía a la vida misma alejarse de mí. “No es nada”; me dije.
Cuando lo escuchaba hablar con otros hombres acerca de mí. “No es nada”, me dije.
Cuando varios hombres vinieron a verme y usarme. “No es nada”, me dije.
En el momento que él me hizo cerrar los ojos para siempre. “No es nada”, me dije.
A pesar de que vi a mi mamá buscarme y llorarme. “No es nada”, me dije.
Después de ver a mis amigas pegar carteles con mi rostro. “No es nada”, me dije.
A pesar de que mi amado no hacía nada más que buscarme por toda la ciudad. “No es nada”, me dije.
En el momento que vi mi cuerpo enterrado en un terreno lejos de la ciudad. “No es nada”, me dije.
Cuando los carteles con mi cara empezaron a caer. “No es nada”, me dije.
Y en el momento que me dije que yo no era nada, me di cuenta: yo no era nada, yo lo era todo… hija, nieta, sobrina, prima, amiga, novia, estudiante, compañera. Yo lo llegué a ser todo, mi único error en este mundo fue el ser mujer en un mundo hecho para los hombres, en un mundo donde los hombres tienen el poder sobre nuestra vida.
Bajo los ojos de la autoridad, yo no era nada, era una cifra más.
Bajo los ojos de él, yo no era nada; era una muchacha de más, la cual lo aburrió.
Bajo los ojos de muchas personas, yo no era nada, era una mujer que tuvo la culpa.
Pero a los ojos de mis hermanas; yo lo sería todo hasta encontrarme.

Más sobre Ventana Interior

Nos dijimos tanto “te amo” que ya no

 Nos dijimos tanto “te amo” que ya no

Por: Miroslava Delgadillo Ortiz
Ahora sabes que no regresaré y ya no te duele

Leer
¿En dónde quedé yo?

¿En dónde quedé yo?

Por: Oscar Miriel Ávila Ibañez
Sobre el amor perdido que nunca se fue

Leer
Con los ojos abiertos

Con los ojos abiertos

Por: Víctor Manuel Méndez Reyes
Historia sobre la consumación de un amor

Leer
La parábola de mi corazón

La parábola de mi corazón

Por: Alexis Sebastián Hernández Guzmán
Relato sobre el amor como la necesidad de cruzar dos líneas paralelas

Leer
La vida sirve para dos cosas, amar y morir

La vida sirve para dos cosas, amar y morir

Por: Karol García Estrada
Aunque el amor no mata, el final se siente de esa manera, aún así, vale la pena sentirlo

Leer
Seamos

Seamos

Por: Daniela Reyes Cruz
Un deseo escrito desde el corazón

Leer

Deja tus comentarios sobre el artículo

No es nada

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

thirteen − two =