Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales
Bienvenido al circo llamado mi tierra mexicana,
es un chiste decir que mi patria es soberana,
eso se ve reflejado en el noticiero cada mañana,
donde el pueblo siempre pierde y el gobierno siempre gana.
Y eso es siempre a costa de otros,
¿es el México de ellos o es el México de nosotros?
El que construimos día con día a base de esfuerzo,
sudando sangre, mientras somos gobernados por un tipo perverso.
Son los problemas de mi nación, parece no haber solución,
desde delincuencia hasta la triste migración.
Te llevan a prisión si cruzas la frontera,
si no hay trabajo, no hay dinero, es lógico que la gente se desespera.
Lo único malo que puede pasar es que la gente se muera
a consecuencia de buscar una vida mejor,
se convierte en dolor,
no valoran el amor
que le tengo a este verde, blanco y rojo color.
México es mi tierra, cómo tener un país digno si los de arriba las puertas cierran.
En guerra se convierte cuando el pueblo se rebela,
cambiar a México es lo que el proletariado anhela,
y no es novela, no hay un final feliz.
En brazos arde mi país,
México muere por una pequeña cicatriz,
y es que hay que arrancar el problema de raíz.
Pedir a Dios, cardenal, lo dudo no soy devoto,
pero al cumplir 18 tendrás que dar tu voto,
si no apoyas a ese fulano puede que termines con el labio roto,
y es que, político, tu ley apesta,
está el pueblo en el Monumento a la Revolución haciendo protesta,
en busca de una respuesta
de si esto va a cambiar o es en vano,
somos ciudadanos mexicanos,
nos damos las manos,
ya lo dijeron Los tigres del Norte: “esto va de paisano a paisano”.
Y es que es la ciudad de la esperanza.
Aquí el que no tranza no avanza,
el peso en la balanza no es el mismo,
cada 6 años nuevo presidente,
cada 6 años más hundidos en el abismo.
Y hasta la fecha no se explica dónde está el dinero de la deuda externa,
me enferma saber que políticamente somos un cero a la izquierda.
A nivel nacional, México no es igual,
cada partido político es el mismísimo mal.
Al salario cada vez se le aumenta cierto porcentaje,
da coraje, que no hay agua y los tipos vestidos de traje.
Hay que verse bien para la próxima candidatura,
para seguir tirando el maldito dinero a la basura,
y aseguran que todo esto cambiará,
¿qué pasará?, ¿un buen mañana llegará?
No lo sé, sólo sé que este sistema
a patético me suena,
la ola de violencia dime, ¿quién la frena?
Aquí la abeja reina se queda con toda la miel de la colmena.
Hasta parece película de terror,
es un horror que mi patria vaya cada vez peor.
Y nunca haya mejora,
cómo llora mi país a cada hora,
y todos lo ignoran.
Parece que a esos tipos no les importa esta nación,
se ve por televisión cada daño que causan en diferente ocasión.
O más bien el dinero que se va en su bolsillo,
cada ganancia del país desaparece en un ratillo,
así lo decía Víctor Trujillo.
Pero qué se espera si es el país de las oportunidades,
primeras damas gastan demasiado en sus vanidades,
presupuesto no hay para las navidades.
Diferentes edades, y ya es necesario trabajar,
no importa si estás muy morro o muy anciano,
lo que importa es comenzar a ganar el sustento familiar.
De una vez por todas,
aunque ni la beca ni el INAPAM te alcancen para comprar lo que está de moda,
México está en la basura en cuestión política,
cómo deprime que el país esté en una situación crítica,
y nadie explica qué es lo que pasa,
no sé qué visión de la vida tener al salir de casa.
Y es que para cualquier problema el dinero siempre es un exabrupto.
Y es que duele saber que vivimos en un sistema corrupto.
Un cambio no se planifica hacia el futuro, mejor dicho es un sueño,
hay que poner empeño,
que México no tiene dueño.
La nación es del pueblo y para el pueblo que en ella habita,
es hipócrita quien vende al país y el 15 de septiembre “¡Viva México!” nos grita…
Finalizo este verso diciendo que una revolución es lo que se necesita.
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