En este texto el autor revisa algunos elementos históricos y sociológicos para explicar el origen y desarrollo de la cultura empresarial en la educación superior privada en México, particularmente en el caso del Tecnológico de Monterrey, en Nuevo León, el cual, a decir del autor, evidencia la adopción y enseñanza de la cultura empresarial resultado de una adaptación educativa nacional al capitalismo y la internacionalización. Con base en los presupuestos teóricos de Bourdieu sobre la legitimación de las élites, se demuestra que el Tec de Monterrey hace una construcción social de una visión económica (que articula la economía mexicana con la global).

El texto aborda la relación entre la educación universitaria y la economía, el auge de la educación superior privada sobre todo en el norte del país y la influencia de la cultura empresarial en el Tec de Monterrey. Esto bajo un marco teórico (Durkheim, Mauss, Bourdieu) que permite tomar una perspectiva histórica en el estudio de la enseñanza superior; sobre todo, se emplea el análisis de Bourdieu sobre los mecanismos de reproducción de las estructuras sociales y las estructuras cognitivas que, en este caso, se vislumbran en el habitus empresarial del Tec de Monterrey.

El trabajo resulta de una investigación cualitativa con trabajo de campo en el Tec en 2002. Algunas de las técnicas empleadas fueron entrevistas semi-directivas, etnografía y observación participante en las aulas, así como consulta de archivo en periódicos locales. En total se realizaron 49 entrevistas. Una vez recuperados los datos, el autor hace un análisis sociohistórico del desarrollo industrial en Monterrey para comprender el origen del Tec; la influencia del empresariado en las instituciones de educación superior privadas, y el impacto de la visión económica en la representación del mundo social para los estudiantes.

Sobre la socio-génesis de la enseñanza técnica y superior, el autor menciona que la educación superior privada en Monterrey es indisociable de la industrialización de finales del siglo XIX: “La naciente industria permite deducir la creciente necesidad de mano de obra calificada en la región y, por ende, de formación profesional” (García Garza, 2013). A propósito de esto, y contrario a ‘prejuicios comúnmente admitidos’, el autor señala que la creación del Tec no obedece a razones ideológicas sino a la ausencia de formación profesional en la región. Respecto a la cultura empresarial en la formación universitaria, se menciona que la introducción de esta se presentó como una innovación distintiva del Tec, transmitida por asignaturas obligatorias. Lo anterior resultado de las condiciones socioeconómicas de la llamada ‘década perdida’ a nivel nacional: “La política educativa del Tec experimenta una mutación importante durante este periodo, al pasar de la formación de ejecutivos e ingenieros, a la de ‘emprendedores” (García Garza, 2013). Finalmente, sobre la construcción social de la educación empresarial, el autor muestra cómo el Tec y el Estado mexicano, a través de cierta oferta educativa, construyen una ‘visión empresarial de la existencia’.Por último, entre sus conclusiones, el autor menciona que el Tec de Monterrey “sería el portador y difusor de nuevos valores morales, convirtiéndose en una de esas instituciones que, a través de la educación, mantienen el orden capitalista” (García Garza, 2013) y que, en general, el origen, implementación y auge de la cultura empresarial en la educación superior mexicana es resultado de la historia socioeconómica contemporánea.