Una oda es una composición poética que celebra o elogia a alguien o algo. Se caracteriza por su tono elevado y la expresión de emociones exaltadas, a menudo con el objetivo de resaltar cualidades positivas del objeto de la alabanza. 

 Esto no es una oda, 

            (pero podría serlo).

Cira cree que amar la ha llevado a los lugares más extraños de su mente, se ha cuestionado mil y un cosas. A día de hoy sigue sin saber si hay una forma correcta de amar. Escribir y pensar sobre el amor siempre la llevan a la misma dirección, no lo hace para explicarlo, sino para entenderlo. 

i.

te entrego cada verso, cada respiro y cada parte de mi alma (que es quizá lo único que trasciende e importa en este plano); y si eso no te basta, me muestro vulnerable ante ti, te cedo el poder de destruirme, o de amarme.

ojalá sepas qué hacer con tanto. 

                                   te quiero. 

ii.

¿Cuánto tiempo más podré fingir demencia?, se pregunta a diario. 

Cira piensa que al evadir sus sentimientos hará que estos se vayan, por ello evita hablar del tema en voz alta, solo así podrían ser menos reales. 

(No es nuestra culpa querernos tanto,

amar nunca será malo).

Pero con él todo parece incorrecto, ha roto en llanto cuando cae en cuenta de cuánto lo ha querido y lo poco correspondida que se siente; en ese momento un nuevo miedo nace: que la quieran en voz baja, entre murmullos, en secreto. 

Que curioso es querer mucho a alguien y sentir que no se merece ese cariño en lo más mínimo.

iii. 

Mucho surge del amor y del dolor. 

iv.

todas las palabras en mi mente carecen de sentido, ¿sobre qué trata esto? 

¿sobre mí y lo que siento por ti?, ¿o solo sobre ti? 

v.

Evitar las causas perdidas nunca fue lo suyo. Quizá esta vez fue porque se encontró a sí misma en sus ojos, esos que parecían dos pequeñas raciones de miel. Cira siempre ha pensado que los ojos son la ventana del alma, algo con lo que puedes llegar a conocer a las personas sin que haya palabras de por medio. 

Pero con él fue diferente. Encontró todo y nada. Le gustaba creer que podría descifrarlo, quería encontrar algo más, algo que la hiciera entender el porqué de su afán por buscar con desesperación su cercanía. Sin embargo, con el tiempo se dió cuenta de una sola cosa: su patética forma de querer. 

¿Acaso eso importaba? Claro que no. Ella lo quería. 

¿Por qué? Algo que todos querían saber. 

vii. 

he decidido creer en tu mirada y en el hecho de que dices quererme. 

la fe es ciega pero funcional para quien necesita ser guiado en su paso 

por esta vida, por ello me dejaré llevar hacia la dirección que tú decidas 

aunque se trate de un camino lleno de incertidumbre o uno que me lleve a un abismo
como el que está presente en tus ojos. 

¿qué más hay detrás de ti? 

por favor, déjame saberlo.
(siento que no te conozco en lo absoluto)

Querido tú:

me encantaría poder escribir esto en cualquier otro idioma (incluso en uno inventado) uno que no logres entender, por desgracia aún no aprendo otro del todo. no quiero, ni espero, que comprendas nada de esto, mis palabras siempre han carecido de sentido tratándose de ti y no busco que deje de ser así, pese a esto, aquí estoy. 

querer de más siempre consiguió terminar conmigo, mis emociones me han consumido durante gran parte de mi vida, por fortuna, o desgracia, es lo que me hace ser la persona que soy (lo que sea que signifique eso). he querido descifrar si existe la manera correcta de amar a las personas y he caído en cuenta de que es casi imposible saberlo, al menos con total certeza. 

conozco las emociones pasajeras, solía vivirlas en carne propia, por ello sé que nada de esto lo fue, pese a que hay días en los que te detesto, y otros en los que te quiero a más no poder, ¿qué sentido tiene eso? no lo sé, supongo que ninguno.

-C

viii.

siento que solo existo donde y cuando quieres, 

he desconfiado de lo que soy para ti, 

incluso dudé de mí misma, por ti, por todo.

¿qué tan complicado puede ser querer en voz alta?